Llevar una vida consagrada a Jesús, en memoria de Jesús, significa, en primer lugar, que esa memoria, ese recuerdo, sea un recuerdo sanador. ¿Cómo cura el recuerdo de Jesús? El recuerdo de Jesucristo cura porque eleva nuestra pequeña vida y la pone en contacto con un acontecimiento mucho mayor. Como cristianos participamos en la memoria que se remonta atrás, muy atrás, hasta el momento en que el propio Dios entró en la historia y compartió la condición humana. Cuando nuestra pequeña histo- ria puede conectarse con la gran historia de la salvación, tiene lugar un enorme cambio, porque nuestros pequeños dolores y nuestras pequeñas alegrías ya no son pequeños dolores y pequeñas alegrías, sino que apuntan más allá de sí mismos… a un gran acontecimiento de salvación del que ahora formamos parte […] Nuestra vida puede sanarse gracias al memorial de la encarnación y a la historia de la salvación.